En Chile las Fiestas Patrias se celebran los días 18 y 19 de septiembre de cada año. El 18 de septiembre es por Ley, la «conmemoración de la Independencia Nacional», y el 19, la «celebración de todas las Glorias del Ejército».
El 18 de septiembre de 1810, es el hito que recordamos, ya que marca el inicio del proceso de independencia de la Corona Española, y de la formación de Chile como Estado Nación. Sin embargo, nuestra independencia propiamente tal, vendría ocho años después, un 12 de febrero de 1818. Si quieres conocer un poco más sobre el proceso histórico de nuestra Independencia pincha aquí.
Nuestras Fiestas Patrias vienen cargadas de historia, y es la fecha más esperada por los chilenos. En estas fiestas, se reúnen las familias y amigos para celebrar el “ser chilenos”, con baile, música, juegos, buena mesa y tradiciones que han sido y son trasmitidas de generación en generación.
Durante estos días, todo el país se viste de rojo, azul y blanco, los colores de la bandera chilena, y las calles se llenan de alegría y patriotismo. Esto, junto con el despertar de la primavera, hace que sea una fecha inolvidable.
El 18 y 19 de septiembre es una celebración donde los chilenos sienten orgullo por su país.
La encuesta Cadem del año pasado reveló la respuesta de los chilenos a la siguiente pregunta: Qué es lo primero que se te viene a la cabeza cuando te preguntan qué es ser chileno.
Las principales respuestas mencionan las empanadas, la comida típica, el patriotismo, los paisajes, el 18 de septiembre y las Fiestas Patrias.
Otra de las preguntas, fue relacionada a cuánto orgullo siente una persona, a diferentes elementos relacionados a Chile.
Un 85% mencionó la comida chilena, un 83% el folclore chileno, un 80% ser chileno en general y un 79% la música chilena.
Mientras que, la pregunta: ¿Qué tan cercano o identificado te sientes con estas cosas que son típicamente chilenas?, tuvo por respuesta las Fiestas Patrias, ocupando el primer lugar con un 84% de las preferencias, seguido de la bandera (82%), y la canción nacional (75%).
A raíz de lo anterior, es que en el siguiente artículo te queremos hablar sobre cómo se celebran las Fiestas Patrias en Chile, cuáles son sus tradiciones más comunes, además de darte algunos consejos para que las celebres disfrutándolas al máximo.
Tradiciones dieciocheras en las Fiestas Patrias
A continuación, te contamos sobre las costumbres y actividades típicas con que celebramos los chilenos «el Dieciocho».
Ramadas o Fondas
Las ramadas o fondas son el corazón de las Fiestas Patrias. Familias y amigos se reúnen en estos lugares para celebrar con comida, bebida, música, canto y baile tradicional. Se organizan en todas las ciudades, levantando troncos como varillas y cobertizos de ramas entrelazadas para generar sombra.
La fonda más grande de Chile se celebra en el Parque O´Higgins, congregando a más de 50 mil personas cada año.
Son centros de diversión populares, de índole familiar y lúdico. Es la expresión más emblemática de la festividad del 18.
Desfiles y eventos cívicos
Durante septiembre las escuelas, municipalidades, e instituciones de todo tipo, organizan eventos cívicos y festivos para honrar a los héroes de la independencia y realzar la chilenidad. Es muy común ver en la calle a escolares vestidos de chinitas y huasitos. En la gran parada militar del 19 de septiembre, las fuerzas armadas hacen gala de su formación, y es uno de los puntos más altos de estas fiestas, congregando a gran cantidad de público.
El Folclore Chileno
Dentro de las expresiones más típicas de nuestro folclore, en las que se incluye al conjunto de artesanías, bailes, chistes, costumbres, cuentos, historias orales, leyendas, música, proverbios, supersticiones y demás tradiciones que se dan a lo largo del territorio nacional; nos detendremos en tres de ellas: el baile, los trajes típicos y juegos chilenos.
Baile: La cueca
La cueca es el baile nacional de Chile. Voces, guitarras, arpas y tambores, entre otros instrumentos, animan la celebración, creando un ambiente festivo y lleno de vida.
Esta danza representa el cortejo entre un gallo y una gallina, y simboliza las distintas etapas de un idilio, en el que los bailarines con rápidos movimientos se buscan y se esquivan. Los bailarines con pañuelo blanco en mano, trazan figuras con vueltas y medias vueltas.
Existe la cueca tradicional, elegante, brava, nortina y chilota. ¡Cada una con su ritmo y traje adecuados para el cortejo!
¡No hay fiesta completa, sin una buena cueca!
Trajes típicos chilenos
La vestimenta tradicional varía según la región y el contexto cultural en el que se encuentre. Algunas de las prendas más comunes son el chamanto (capa de lana gruesa y tejida a mano que se utiliza para protegerse del frío), la chupalla (sombrero de paja utilizado principalmente en la zona central del país), el poncho, la manta, la ruana y el trarilonco.
La zona sur de Chile se caracteriza por su clima húmedo y frío, por lo que es común encontrar prendas tejidas a mano con lana de oveja, como los chalecos, los gorros y las mantas.
Juegos típicos chilenos
Los juegos tradicionales también son una parte integral de las celebraciones del dieciocho.
Los dos juegos más populares son el ‘palo encebado’, en el que los participantes intentan trepar un poste resbaladizo para alcanzar un premio en la cima, y la cuerda, que es un juego de fuerza en equipo.
Algo muy lindo, es ver como parques enteros se llenan de color, con niños y adultos elevando volantines, pues justamente septiembre es un mes de mucho viento en Chile.
Muy común es jugar al tejo, o más conocido como la “rayuela”, que consiste en lanzar a cierta distancia un tejo (o disco) metálico en un cajón de arcilla o arena.
Este cajón está dividido en la mitad por una línea trazada con tiza o lienza tensada dispuesta a lo ancho. Los jugadores se van alternando y el tejo que queda más cerca de la lienza obtiene los puntos. Si se acierta a la lienza – jugada conocida como «quemada»- se adjudica doble puntaje.
Otro juego clásico, para grandes y chicos, es el difícil “emboque”. Consiste en encajar un pequeño palo en el agujero del emboque, que es una estructura de madera con forma de campana. Paciencia, perseverancia y buen pulso, son claves para el éxito.
También se organizan divertidas carreras de sacos, donde el que menos tropieza, y más rápido llega a la línea de meta, ¡gana!
Y finalmente el “trompo”, un objeto de madera con clavo de acero, que hay que lanzar con fuerza utilizando un cordel para hacerlo “bailar”.
La comida chilena
Durante las Fiestas Patrias, la gastronomía es otra protagonista. Algunos de los platos que caracterizan la temporada incluyen la popular empanada de pino, anticuchos, choripán, ensalada chilena (tomate con cebolla), y cordero al palo. No te pierdas el sabor auténtico del pebre chileno, una salsa fresca y picante que acompaña cualquier plato. Un lugar especial se lleva el “pastel de choclo”, que recientemente se ha ganado el premio al mejor budín del mundo, según el ranking de Taste Atlas (en mayo de 2023) y en el 2024, siguió en el top 3 mundial.
Las bebidas no se quedan atrás, y una de las preparaciones más populares en estas fechas es la del “terremoto”, que se hace con vino pipeño, helado de piña y granadina. Algunas versiones incluyen licores como pisco, ron o fernet, lo que significa que el terremoto es una bebida alcohólica fuerte, aunque su dulzura lo disimula. Es común que la gente tome «réplicas» o incluso una tercera ronda, pudiendo llegar a ser un panorama devastador. De ahí deriva su fama y nombre, “terremoto”, (algo a lo que estamos acostumbrados en Chile).
Si de dulces hablamos, no podemos dejar de mencionar al exquisito manjar chileno (caramelo de leche o dulce de leche), que rellena tortas, cuchuflíes, pasteles y “dulces chilenos”, como alfajores embetunados, empolvados, príncipes, pasteles de mil hojas y/o merengones.
Y, por último, mencionar el imbatible “mote con huesillos”, una preparación que debe comerse y tomar heladito. Es muy característico de la zona central de Chile, y se compone de una mezcla de jugo acaramelado de durazno, mote de trigo y duraznos deshidratados.
5 Consejos para disfrutar al máximo las Fiestas Patrias
Aquí tienes algunos consejos para aprovechar al máximo esta época tan especial del año.
- Participar de una actividad local con tus seres queridos
Buscar actividades locales cerca de tu comunidad. Desde desfiles y juegos tradicionales hasta eventos culturales, participar en actividades locales te permitirá conectar con la tradición y la comunidad.
- Planificar qué vas a hacer con anticipación
Para evitar contratiempos, planifica con anticipación. Reserva un lugar en una fonda o ramada tradicional y averigua si hay eventos especiales en tu ciudad. Revisa bien tu presupuesto y tiempo. ¡No te quedes fuera de las festividades!
- Probar comida típica
Las Fiestas Patrias son la excusa perfecta para disfrutar de la deliciosa gastronomía chilena. El único consejo que te podemos dar, ya que todo es muy rico, es que vayas con cuidado y moderación, ya que luego de primavera, ¡viene el verano!
- Aprender algunos pasos de cueca para «darlo todo» en la fiesta:
La cueca es el baile nacional de Chile y no puede faltar en las Fiestas Patrias. Anímate a aprender algunos pasos básicos para disfrutar al máximo de la música del baile típico chileno.
- Después de unas buenas empanadas, anticuchos y… ¡terremoto! … Volver a la rutina con un buen «detox» casero
Luego de disfrutar de las delicias gastronómicas y bebidas típicas, es importante cuidar tu cuerpo. Prueba un buen «detox» casero con agua con limón, jugos naturales o una sopa ligera para recuperarte y volver a la rutina con energía renovada.
- Celebra junto a tu Equipo con Bodeguita!
En bodeguita.cl, estamos preparados con los regalos más chilenos y entretenidos para que celebres junto a tu equipo en estas Fiestas Patrias. Conoce nuestros originales regalos que tenemos dispuestos para estas fechas tales como: pecheras, tablas, salsas y mucho más aquí.
¡Con estos consejos, estás listo para vivir unas Fiestas Patrias inolvidables! Disfruta de la cultura, la comida y las tradiciones de Chile como nunca antes. ¡Viva Chile!
Algo de Contexto Histórico:
Para comprender un poco mejor el proceso de independización nacional, debemos retroceder un par de siglos en el tiempo, y cruzar el Atlántico hasta llegar a España, que había sido invadida y ocupada por tropas francesas lideradas por Napoleón. Junto a la ocupación militar de España por parte de los franceses, ocurre en 1808, el secuestro y abdicación forzosa del rey borbón Fernando VII, en favor de Napoleón, quien a su vez designó como rey de España, a su hermano mayor, José Bonaparte, quien reinó bajo el nombre de José I, conocido popularmente como “Pepe Botella”.
Fueron estos dos hechos, la ocupación francesa de España y la abdicación del rey en favor de José I, los factores clave que gatillaron el comienzo del desmembramiento del gran imperio español en favor de la independización de las colonias americanas.
En Chile, la reacción inmediata ante la ausencia del rey, fue de absoluta lealtad hacia el monarca preso, no reconociendo a José Bonaparte como rey. En España, se forma la “Junta Central”, que organizaría la resistencia española a la ocupación militar francesa y que tenía también entre sus funciones gobernar a las colonias americanas.
Sin embargo, ya hacia 1809, empiezan a decantar dos posturas en los chilenos criollos, ante el vacío de gobierno que se había generado en la corona española, y también, acerca de la legitimidad de la autoridad de esta nueva institución creada por el pueblo español, para regir a las colonias americanas. Esto, porque el vínculo del territorio americano con España era una relación directa con el rey, y no con otra entidad.
Entonces, por un lado, estaban los realistas, quienes reconocían la soberanía de las instituciones españolas en reemplazo del rey y condenaban todo intento de formar un gobierno autónomo, aunque fuese en su nombre. Y por otro, los patriotas, quienes, aun siendo fieles al monarca, creían en el cambio de soberanía admitiendo la necesidad de formar una junta de gobierno propia. La tensión fue creciendo y llegó a su máximo punto cuando el Cabildo de Santiago, junto con la intervención de la Real Audiencia, consiguieron la dimisión del despótico gobernador español García Carrasco, en favor del militar de más alta graduación, quien fuera, Mateo de Toro y Zambrano. El Cabildo de Santiago, consiguió autorización de su presidente para convocar a un cabildo abierto, en el que participaron la gran mayoría de los vecinos de la ciudad, y que procedió a nombrar a la Primera Junta Nacional de Gobierno y a don Mateo de Toro y Zambrano, como su Presidente.
El cabildo abierto del 18 de septiembre de 1810, fue la primera vez que la aristocracia criolla tomaba el control de su propio país y sería el primer paso en nuestro proceso independentista. Es por eso que celebramos el 18 de septiembre, como la fecha en que comienza el camino hacia convertirnos en una nación soberana.
Luego de este primer hito, vendrían 8 años de convulsión y lucha entre patriotas y realistas, hasta que un 12 de febrero de 1818, – a un año de la victoria de los patriotas sobre el ejército realista en la Batalla de Chacabuco en que se logró recuperar la ciudad de Santiago -, se firma el Acta de Independencia, documento mediante el cual Chile declara solemnemente su independencia de la monarquía española.